El día 8 necesitaba asistencia para sentarse, el día 9 ya pudo permanecer de pie durante horas, incluso bajo la lluvia

Durante los últimos plenos municipales Ignacio Ramos disculpaba a la concejala socialista Ute Kaiser de su asistencia completa a los mismo. La justificación que se daba era una enfermedad que está padeciendo la peculiar alemana que le impedía permanecer durante un periodo extenso en el salón de plenos. Incluso en alguna ocasión Ignacio cambió el orden del día para que Ute pudiera votar y luego marcharse a su casa o donde fuera.

Esta justificación por parte del alcalde para que la concejala socialista abandonara el salón se produjo también en el pleno municipal celebrado el pasado día 8 de octubre. Ute Kaiser tuvo que ser asistida a la entrada del recinto, luego un solícito y desvivido Francis Vizcaíno le atendió, corriendo la silla para ayudarle a sentarse. Kaiser permaneció el tiempo justo para levantar la mano y votar en el punto dedicado a subir la tasa del agua a los pilareños, que tendrá como resultado que se nos obligará a los vecinos a pagar más por este servicio. Inmediatamente, justificada por Ignacio, abandonó el Pleno, su enfermedad no le permitía seguir presente.

Esto ocurrió el día 8 de octubre, pues bien, en la tarde del 9, sólo un día después, se celebraba la inauguración del nuevo Ayuntamiento. Como es lógico y tras lo presenciado el día anterior, nadie esperaba que Ute Kaiser acudiera, estaba muy enferma. Pero lo que son las cosas, allí se presentó la socialista alemana, ahora sin tanta necesidad de ayuda y sin el apoyo desvivido de Vizcaíno. ¿Estaría solamente unos momentos y ser marcharía ? Pues nada de eso, la concejala permaneció unas dos horas de pie, incluso bajo la lluvia, sin problemas aparentes….

Esta recuperación casi milagrosa alegró a los presentes, incluso algunos hablaron de una posible intercesión de la Virgen del Pilar, cuando ya cerca de su día, hubiera tenido esa acción para la conversión total de la concejala.

Todo puede ser