jueves, 21 de abril de 2011

Cosas nuestras

El periodo electoral ya ha comenzado, todos conocemos ya las candidaturas y quiénes las componen. Entramos en un periodo donde la actualidad política se hace más intensa. Las diferentes formaciones empiezan a adoptar sus estrategias y es el momento de intentar aumentar el número de partidarios y electores. El 22 de mayo está cerca.

La actualidad política es el tema principal de este blog. La Oreja Pilareña, con una antigüedad que supera los cuatro años, ya es un referente como medio de comunicación pilareño en Internet. Iniciábamos nuestra andadura como algo experimental. Apostábamos sobre seguro, convencidos de que la importancia de la Red iría in crescendo. No hacía falta ser Julio Verne para deducirlo. No nos podemos quejar, desde nuestros inicios hemos tenido un nivel de lectores muy superior a nuestras expectativas iniciales y tras varias etapas, y algunas sin publicar, nos encontramos ahora viviendo un momento, digamos, de mucho éxito. El número de lectores aumenta diariamente y llegamos a cifras ya considerables, con un grado de fidelidad bastante importante. Estamos en elecciones.

No todo el mérito es nuestro, ni mucho menos, sería absurdo obviar que disponemos de un gran hueco. La revolución tecnológica, y sobre todo la de Internet, ha producido el declive de algunos sectores, y eso ha ocurrido en los medios de comunicación locales. Mantener una  publicación en papel, tal como está la publicidad, se convierte en algo muy difícil. El Horadada Información se ha tenido que reinventar, creando un híbrido con el periódico de San Pedro. La radio local del Pilar tampoco se ha caracterizado nunca por prestar una excesiva atención a las cuestiones informativas, el Taller de Imagen se encuentra en una ilegalidad y muerto por el apagón digital, y el medio de comunicación por excelencia de este pueblo, TV Horadada,  el más seguido y el más querido con muchísima diferencia, de momento, dormido. El veterano 
Foropilar, nuestro eterno compañero en Internet, tampoco está viviendo su mejor momento (y que nadie se equivoque, otro día lo explicaremos con detalle, pero a nosotros nos beneficia que el foro tenga muchas visitas).

Con este panorama, La Oreja Pilareña se convierte en una herramienta casi indispensable para todos aquellos que tienen interés en ir siguiendo el pulso político de Pilar de la Horadada. Ojo, que también nosotros nos lo trabajamos.

Línea editorial
La Oreja Pilareña tiene muchos lectores, a los que mayoritariamente les gusta, pero también tenemos un buen número, que no les agradamos y son críticos con nosotros. Lógico.

La Oreja, como absolutamente todos los medios de comunicación de España y del mundo, tiene una línea editorial y quien diga lo contrario, miente. El diario El Pais tiene su línea editorial, El Mundo la suya, el diario Información, el periódico Público,  la Cadena Ser, Intereconomía, The New York Times, The Guardian... y también, La Oreja Pilareña. Pero no nos equivoquemos, eso no significa que las informaciones que se ofrecen no sean veraces, lo son. En nuestros cuatro años de vida han sido muchas las ocasiones en las que se nos  ha intentado llevar a los tribunales, de momento, aquí estamos, sin una condena y, ahora, que sepamos, sin ningún procedimiento abierto. Trabajamos para ser rigurosos, esforzándonos mucho en ello.  También, y lo decimos fuerte y claro, somos absolutamente independientes. 

Presiones
¡Pues claro que hemos recibido presiones!, muchas y provenientes de la casi totalidad del arco político pilareño y de otros estamentos sociales. Lo normal en cualquier medio de comunicación con un mínimo de relevancia; al igual que hemos sufrido intentos de  sabotaje, tecnológicos y de otros tipos. Lo que cualquiera, con un mínimo de experiencia en esto del periodismo, se puede esperar.

¿Qué formación política es la que se ha sentido más agraviada con La Oreja Pilareña? Indiscutiblemente el PSOE, y más concretamente lo que se denomina "el ignacismo", pero eso se debe a nuestra clara línea editorial. También es lógico que quien ostenta el poder se sienta más incómodo con los medios de comunicación que no controla, más si son independientes. Pero la segunda formación política, con un sentimiento de resquemor hacia la Oreja, y sabemos que esto va a sorprender, es Unión Pilareña. De verdad. ¿Por qué? Pues es muy sencillo de entender. Existe, y no deja de ser una auténtica leyenda urbana, la creencia de que es Pepa Meroño quien escribe este blog, y eso es absolutamente falso. No es cierto, es mentira. 

Esa mentira ha sido utilizada interesadamente por algunos de sus rivales políticos, que intentan hacer creer que La Oreja Pilareña es la portavoz del pensamiento de Unión Pilareña y lo que se dice en el blog lo escribe la Meroño. Por lo tanto a UP le incomodan algunas de las posturas de la Oreja, ya que muchísimas personas creen que lo que escribimos nosotros, es autoría de Pepa. Recientemente se ha producido un ejemplo, con el tema del abandono de María Dolores Moreno del PP y su incorporación a AIH. La Oreja Pilareña ha mantenido una actitud muy crítica con la hija de Matilde. Esa ruptura podía interesar indirectamente a UP, nosotros estuvimos en contra, y las culpas por nuestras críticas, al final,  las recibió Pepa Meroño. Era un locura. 

Como es lógico, desde UP en este caso y en otros, con  elegancia, se intentaba presionarnos para que paráramos las críticas (todo hay que decirlo, fueron presiones con elegancia y respeto), porque María Dolores pensaba que era Pepa quien las provocaba. No cedimos y fuimos libres.

Con UP coincidimos en cosas ideológicamente, sobre todo en la postura crítica contra Ignacio Ramos y en estar convencidos de que su mala gestión está trayendo  consecuencias nefastas para Pilar de la Horadada. Nuestras relaciones con Unión Pilareña son buenas, pero no somos su órgano de comunicación.

El ejemplo del caso de la concejala María Dolores es sólo eso, un ejemplo, pero se han dado muchos casos. Probablemente hayamos perjudicado más a Unión Pilareña que la hayamos beneficiado por esa causa, y en más de una ocasión hemos visto reducida nuestra libertad por ese motivo.

Los comentarios
El esquema de La Oreja Pilareña consiste en una noticia redactada por el equipo y luego se da acceso a los lectores para que realicen los comentarios que les de la gana. Ya hemos demostrado nuestra falta de interés por moderarlos o censurarlos. Tenemos a gala que en las anteriores elecciones solamente se borraron tres o cuatro comentarios, ¡y mira que se dijeron burradas!, y contra nosotros, auténticas salvajadas.
Creemos en la libertad de las personas. Nunca jamás hemos controlado las identidades, no tenemos ningún sistema instalado  para controlar ips (no sabemos ni si es posible, no nos hemos preocupado). A nosotros, borrar un comentario nos cuesta unos 5 segundos, pero no lo solemos hacer. Jugamos limpio.

Todo este rollo viene a cuento porque lo que no vamos a consentir, en la medida de nuestras posibilidades, es que se haga un uso abusivo de los comentarios. Cualquier persona normal sabe perfectamente cuáles son los límites, y si alguien se pasa, los vamos a eliminar. Jamás manipularemos, nunca. Nuestra trayectoria en la administración de los comentarios nos da esa credibilidad. Repetimos, no vamos a consentir los abusos.

Por otra parte, aunque no llevamos el control de las ips, no dudaremos en acudir a la justicia si encontramos a alguien que intenta pasarse. A los cuerpos policiales especializados les cuesta nada encontrar a los responsables y, de verdad, que todos los sistemas de ocultación resultan al final inservibles. Más fácil de lo que se piensa. Lo hemos vivido y nos ha sorprendido. En estos momentos, y por denuncia de un lector contra el autor de varios comentarios, tras la autorización judicial necesaria y puesta la policía en marcha, a través de los datos de Google España, del operador de Internet, del distribuidor de caudal,  se está localizando al malicioso autor. Esta mañana, ya hay otro caso.

Estamos hablando de casos significados, que muchos lectores habrán comprobado. Una intervención normal, relativamente correcta, aunque sea muy  crítica, no tiene que producir el más mínimo problema. Todos somos inteligentes y sabemos perfectamente dónde están los límites.

Iniciamos un periodo apasionante, como es el electoral, de esperanzas, ilusiones, trabajo, discusiones, enfrentamientos, desilusiones, penas y alegrías. Es la fiesta de la democracia. Disfrutemos de ella.