martes, 26 de abril de 2011

Incumplimiento exagerado de Juan Ramón Moya de sus obligaciones



Llega el momento de las elecciones y llega el tiempo de las promesas y los compromisos, por lo tanto también es una buena época para que los ciudadanos hagamos un repaso del trabajo que han desarrollado los diferentes políticos.

Resulta difícil para los vecinos saber exactamente el grado de cumplimiento de las obligaciones de los concejales, pero hay datos que son absolutamente objetivos y que no admiten interpretación. Hoy vamos a ver el caso de uno de los más polémicos políticos de nuestro pueblo, como es el teniente de alcalde, hombre de confianza y socio de Ignacio Ramos y portavoz en el Pleno de la Agrupación Independiente Horadada. Además, vuelve en esta ocasión a presentarse a las elecciones como cabeza de lista con AIH.

La ley obliga a los concejales del equipo de gobierno designados a asistir a las denominadas Juntas de Gobierno, así lo indica de forma clara y tajante la Ley de Regimen Local de la Comunidad Valenciana, 8/2010, en su artículo 126. Este órgano es fundamental para el funcionamiento del consistorio y por supuesto para el municipio. Se celebra, generalmente, una sesión a la semana. Pues atentos al dato, el concejal Juan Ramón Moya, de 53  Juntas de Gobierno que, repetimos, tiene la absoluta obligación de asistir, ha faltado a 29, lo que supone que no ha ido a más de la mitad. Esto sólo ha sido en un año.

A las Juntas de Gobierno asiste la Secretaria del Ayuntamiento, que es fedataria de lo que ocurre, para entendernos, como si fuera la notaria de lo que pasa en el ayuntamiento. Ella levanta acta y tiene que indicar quién asiste y quién falta, por lo tanto no es discutible. Existen las pruebas tajantes de los incumplimientos de trabajo y obligaciones de Juan Ramón Moya, de 53 ha faltado a 29.

Además, Juan Ramón Moya casi no ha asistido a otros compromisos que tenía de obligado cumplimiento, como son las Comisiones Informativas, que se celebran previas a los plenos. Y, por si fuera poco, el cabeza de lista de AIH es el portavoz que ha asistido menos a los actos institucionales o de representación, con una diferencia abismal comparado con los otros, unas diez veces menos.

¿Se imaginan ustedes que le ocurriría a un trabajador que falta de su trabajo más del cincuenta por ciento de los días? ¿Sería despedido, se podría confiar en él?

Juan Ramón Moya cuenta con un importante sueldo del ayuntamiento, del que no ha renunciado, ni ha sido disminuido por su falta de cumplimiento en su trabajo y obligaciones. Por si fuera poco, es el concejal de Personal, el encargado de hacer cumplir a los funcionarios y trabajadores municipales.

Ahora le escucharemos comprometerse y prometer para la próxima legislatura. Se le podrá creer o no, pero sus exagerados incumplimientos en esta que finaliza, se encuentran totalmente probados y documentados.

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