viernes, 15 de abril de 2011

GRAVÍSIMA DENUNCIA. Ute Kaiser afirma que está sufriendo acoso moral o psicológico. Culpa a Ignacio Ramos

Cartel  de Ignacio Ramos para las pasadas elecciones municipales del 2007, donde  el fichaje "estrella" que presentaba era Ute Kaiser. Un poster que pasará a la historia iconográfica de este pueblo.


La Oreja Pilareña ha tenido acceso a una documentación, presentada por el Registro General del Ayuntamiento y firmada por la concejala de Medio Ambiente, Ute Kaiser, donde de manera clara afirma que esta siendo boicoteada y que está padeciendo mobbing, que ella misma califica de exagerado.

La traducción de mobbing, y es la denominación recomendada por la Real Academia de la Lengua Española, recogiéndolo ya  en la vigésima tercera edición de su Diccionario, es la de acoso moral o psicológico, definido como la práctica ejercida en las relaciones personales, especialmente en el ámbito laboral, consistente en un trato vejatorio y descalificador hacia una persona, con el fin de desequilibrarla psicológicamente.

El acoso es un tema muy grave, y eso es lo que denuncia la concejala socialista que está padeciendo. Pero aun más grave es a quién acusa Ute Kaiser de admitirlo y de aprobarlo por su falta de respeto: al mismísimo Ignacio Ramos. La concejala del equipo de gobierno dice literalmente:
"Ya hace meses que estoy BOICOTEADA y vivo un MOBBING exagerado, pero porque usted, Don Ignacio Ramos, lo admite y además lo aprueba con su falta de respeto a mi persona".

Esta tremenda acusación no la hace la oposición, ni Fidel Ros, ni Pepa Meroño, tampoco está realizada por un "anónimo", esta denuncia de hechos gravísimos la hace una concejala que trabaja con el alcalde socialista del Pilar, Ignacio Ramos, que para colmo forma parte, por lo menos hasta ahora, de su equipo de gobierno.

Ahí no para la cosa, en ese mismo escrito, Ute Kaiser, dirigiéndose a Ignacio, se pregunta si el Pilar es un pueblo sin leyes, si ella trabaja contra molinos, si es un pueblo moderno, o si es un pueblo pobre que vive del amiguísmo.

Para finalizar, la concejal de Medio Ambiente ofrece su conclusión sobre la forma de actuar de Ignacio, tildándola de falta de profesionalidad en lo que significa administración y dirección

Una vez  que se han hechos públicas estas denuncias, Ignacio Ramos tiene la obligación moral y la responsabilidad política (no sabemos si también penal) de aclarar inmediatamente lo ocurrido. No solamente es la gravedad de lo expuesto si no de quién viene, una mujer, con delegaciones de gobierno y del propio equipo del alcalde.